viernes, 6 de diciembre de 2013

Los cuervos de tus labios





¿Donde estabas tú? en mis ansiedades, por arrancarte el vestido,
y hacer a un lado tus bragas para a través de ese hueco poseerte. 

¿Donde escondiste mariposa, tu aroma
que codicio en la soledad de mi noche?

Regresan los cuervos de tus labios
a romper mi corazón, por sentir la ganas inmensas de ti.
Las arañas de tus dedos recorren mi piel afiebrada.
El vino de tu labios escurriéndome en la imaginación,
despertando endoforminas.

La sensación voluptuosa de tus labios,
tu  succionar; ese placer voluptuoso y abismal,
la voz de Janis, las carcajadas sin sentido,
la felicidad inmensurable, las volutas de humo.
Aquellas esmeraldas, calmando la sed, lo sé no volverán. 

La claridad se despierta y vuelvo al ataúd.

Ergástula.


Detenido estoy en el pasado. En prisión lóbrega

cerrada, oscura. Subterráneas mis pasiones

no ven la luz. En encierro oigo al búho ulular,

los graznidos de un cuervo y a las palomas zurear.

Anhelos idos se elevan sobre mis días. 



Temblor me dan tus oscuridades de estantigua.

Extraño el céfiro matinal, suave, placido

que acariciaba mi rostro y añoro de ti tu gracia,

tu donaire. Tu silueta figulina.


¡Que puedo agregar, sí lo que siento es inefable!

¿Qué palabras podrían explicar la negrura,

de mi oscuro pesar? Fuiste una tirana, porque te quería.

Tú talaste mis olivos, cortaste mis encinas,

y alejaste a mis  pájaros. En paisaje yermo

convertiste, el amor que te tenia. Inhóspito hoy,

sólo observo un cielo de nubes grises y de viento.

Insepulto, hoy soy ulcera NOLI ME TÁNGERE.

martes, 19 de noviembre de 2013

Días de prisión



Esos días grises, de lluvia,
con sabor a despedida.
Eso días de nostalgia,
y de niñez.


Días de añoranza
por los colores idos,
por los amores,
perdidos,
sin saber, ya nada de ellos.

Días de tristeza
que se cuelan
en el alma.

Días de niebla,
en que la desolación
te abruma.

De esos días de poetas,
de leerlos,
sin alivio.

lunes, 18 de noviembre de 2013

13 de mayo de 1903






13 de mayo de 1903


¡Tengo tanto que contarte, tantos proyectos!
He pensado tanto en el nombre para el capitán,
pero por fin me he decidido por Nemo. 


¿Recuerdas que te conté de él
un señor polaco cuyas hijas 

han sido violadas y su mujer asesinada a hachazos?

¡Pues Hetzel insiste en que sean rusos! 

He disfrutado tanto el idear el Nautilus.

Estoy tan satisfecho: la Atlántida
el Mar Rojo, las islas de la Polinesia,
las costas del Lejano Oriente, el Mediterráneo.
¡Ah y lo que ideado: las escafandras
autónomas de buceo, los fusiles de balas eléctricas,
las máquinas para producir aire respirable!

Hoy recibí una carta de mi padre.
¡El mismo regateo por el dinero 
ya te contaré la serie de sandeces que me escribe!

Como me gustaría enviarte un email,
chatear contigo o enviarte mensajes de amor
a cada momento por medio del celular. 

No vayas a reír. Ni te pongas a pensar 

 que me estoy volviendo loco. 
¡Esto sucederá: Avec un clic de la souris!

¡Que hice, he manchado la carta!
disculpa que la envíe así. No tengo más ganas de escribir. 


Te ama Jules.

Carece de importancia este poema,




Carece de importancia este poema,
es fútil...

No hay novedad en la reseña.

¡Es tan trivial!

Requeriría de la intimidad de uno mismo.
¿Y a quien hoy, le importa?

Ni cuentan, ni se aprecian;
los amaneceres y el crepúsculo,
el crecimiento de la espiga,
o el ruido del viento.

¡Nadie se ocupa de mirar a la luna
en las prisa citadina!

¡Es tan insípido, este poema!

domingo, 17 de noviembre de 2013

¡Que Cucujaidea!




Hoy salí al camino
esperando que lloviera.
En el firmamento el sol,
y un cielo límpido.

Me dije a mí mismo: ¿De qué escribiré?

¡Nada de nostalgias, Gabriel,
ni del otoño que se aleja,
por lo de las hojas y añoranzas!

¿Del firmamento gris, del invierno?
¡Ni pensarlo, proclive soy a las tristezas!
Seguro menciono; bancas y parques.

En eso estaba cuando miré una lagartija
y pense... sí, que es un tema ese, pensando en Hallie
inmediatamente, le puse un tilde a pensé

Miré una Catarina, con su coraza roja
sus dos antenas y sus lunares oscuros.
Que Cucuja idea me dije, y la subí a mi dedo.
Pero, por más que no quise, debí realzar;
"mariquitas", "vaquitas", "chinitas",
como les dice el pueblo. Puras asonancias

¿Mariposas? ¡Eso es, un poema
sobre insectos! Pero, en eso, chispeó,
las lagartijas huyeron, la catalina voló.
Las hormigas partieron en hileritas.

Con una alegría inmensa, olvidé el tema;
me mojé, me empapé, me impregné,
me duché, en la cristalina agua,
y la bebí, giré... decenas de vueltas di.

¡Me reproché: mi regreso a las asonancias!

¡Pero para mí la lluvia, es más que solo lluvia.
Y la asonancias… asonancias.


Posdata:  Los coccinélidos (Coccinellidae) son una familia de insectos coleópteros de la superfamilia Cucujoidea

jueves, 14 de noviembre de 2013

Las mañanas en el jardin




Convivencia con fobias

Miraríamos con malos ojos a los psiquiátricos,
las únicas prisiones que transigiríamos
seria, ser de nuestras mente presos;
y nada de cintas brunas,
y nada de impaciencia,
y nada de cordura,
ni de climas fríos.

Aborreceríamos ser de nosotros
sordos mudos o ciegos
No abriríamos sobres, 
no abrigaríamos preguntas sin respuesta.
Disfrutaríamos, claustrofóbicos, 
de nuestras puertas abiertas.

Toda la vida nos mentiríamos
para saber así, cuanto nos amamos, que serían verdades.
Tan cerca estaríamos… para sentir nuestra ausencia.

En casa y en los alrededores, 
dejaríamos señales, para perdernos.
Para tus corazones !compraríamos tantos álbumes!
también para versos y así conjugar 
Tu… Tú el desierto… yo el oasis
Con mi… de tu primavera, yo el cantor,
Con tu….Tú el tallo… yo la rosa.
Con mi… Tú mi voz, yo tu anhelo,
y ser tu sol, yo la abeja, y tú la flor.

Filmaré nuestra boda en blanco y negro.
Al revelar tu imagen serás icono... 
en el equilibrio, de mi cuarto oscuro.

Me iré al aeropuerto a que me digas miles de adioses,
lleno de besos. Sin que lo sepas;
tornare. Cuando no me esperes, tocare a la puerta,
serán mis mimos, mis besos, tu sorpresa.

Todos lo días, serán hoy, sin acordarnos del ayer
En casa tendremos, quijotes, de sentidos idos, ojerosos
y videntes cupidos, sonrosados, sin carcaj, ni flechas
En nuestras noches nos perderemos en nuestros ojos,
nos encontraremos en nuestras bocas.
Sin cielo, ni purgatorios revolotearan nuestras almas,
en la guerra de los cuerpos, entre sabanas.

Tendremos, un buró y encima una botella
con un barco dentro, con velas a lo alto...
por si acaso. Con cajones, llenos de manzanas.
En nuestras noches tendremos, papagayos y loros
que al otro día, a toda costa, tendremos que acallarlos.

Cada mañana, la tibieza de nuestros cuerpos, los avivara la aurora.
la fresca alborada, activara a nuestros pies, fuera de la colcha.
Despierta tú, te besare en la boca,.
Cesaras de ser niña, cada amanecer.
Seré luz de faro, día diáfano. Mar acometiendo tus arenas,
sin hablar, te tendré noticias, de carabelas;
de mundos nuevos, de coral y de arrecifes… 
Buenas nuevas de almíbar y de sal.

Después de un desayuno de besos,
en ese cuarto tan tuyo y tan mió tendremos obligaciones,
lo limpiaremos de la miel y de las migas.

Pasaran lo días, los meses y los años
Todas las mañanas, en el jardín.
sabré que ciertamente eres un colibrí... del que me enamoré.


viernes, 8 de noviembre de 2013

El efecto mariposa.







Sentado en el sofá mi perro

Midas, mordía el periódico.

Me enfada tanto aúllo y roídas.


¡Como se urde una historia!


Tú y tu hija idean salir de compras.

Aquella tarde abordarías un tranvía.

Y del faldero yo huiría.


¡Una centella, un ruido atronador

y el cielo se vino abajo!

Doble la esquina y te vi.

Al frente de ti

me saluda una niña rubia.


Cruzando riveras,

raudales, sin calcetines;

tú de mi reías, tambien,

prendida a ti, la flor de tus entrañas.


¡Se baten las alas, se apiñan tres vidas


Hoy el cuento reinicia:

había una vez, un ser feliz

que con una dama vivía,

y con un ángel por niña.


¡Con un crío por nacer! ¡Que no darías,

por este nuevo nido… y por el mismo perro!

jueves, 7 de noviembre de 2013

La censura



Sabe usted, yo ejerzo mi derecho
de empleado burocrático.
Solo critico,
lo que a mi parecer,
no concuerda conmigo.

Tijeras y fotogramas
antes trabaje en el cine.

Lo que a mi no me parece
y no  se ajusta a lo que pienso
¡pues lo cierro.
faltaba más!
¡A la celda las replicas,
preferible es la clausura!

Despedazar y tachar
antes trabaje en la prensa.

Por cierto cuando critico
ortografía y acentos,
fiscalizo con MAYÚSCULAS
y me olvido de las comas.
¡Eso les produce un… pánico!

Interferencia y anuncios antes laboré en la radio 


Me llamo Ju - Lia. Hoy trabajo en un portal de letras
me levanto muy temprano .
Casi, ni me desayuno
por buscar el yerro,
o las fallas del otro en mi ciberespacio. 


¡Acata mis ordenanzas y te permitiré publicar
Y SI NO TE VAS!.

En tu piel




Fue en tu bello hombro, tu primer tatuaje.
El dibujo de un pequeño corazón.
recuerdo que me dijiste:
te quise grabar en mi piel.
Asentí, con una caricia y un guiño.
No lo niego; me aduló el detalle,
de estar mi memoria, por siempre en ti,
a flor de piel.

Recuerdo que durante nuestro amor,
me excito el grabado y mordí tus labios
y mordí tu hombro, entre roces, locuras,
humedades y besos. 


Me sorprendiste esa noche de luna, 
al mirar en tu espalda desnuda,

aquel árbol del pecado.
Lo reconozco; grandioso,
con tan bellos matices.

Un dibujo precioso,
recuerdo tu bella voz
que ingenua preguntó:
¿Te gusta mi tattoo?
lo hizo un artista de la polinesia.

Desnudos entramos de lleno al juego;
de mirar y ser mirado,
a nuestro deseo de saber.
Saber ser y saber ver.

Mi perplejidad y enfado
termino, en lujuria, entre las sabanas.
Lo juraste por mi: ¡Ni un tatuaje nuevo,
ni así... ni así, de pequeñito!

Pero tu ansia de rebeldía y transgresión,
de inclusión y pertenencia,
derrumbo mi mundo...
no el tuyo,  porque este se transformó
en erotismo atávico y dolor.


Siguió: aquel gato con alas,
nuestras iniciales, el pato
canadiense que amaste en tu niñez,


¡Que distante ese tiempo;
de tu bello cuerpo,
y de tu clara piel,

del rostro del que me enamore!

Grabaste en tu dermis, un mundo externo,
interiorizado en tu piel, proyectado al afuera. 

Te hundiste, en el  placer, de grabar tu piel, 
de la cabeza a los pies.

Me olvidaste y me convertí en fetiche
inserto en tu piel, al que agregaste
piercings en orejas, ombligo y nariz.

Hoy, no te reconozco.
Entre figuras te fui perdiendo.

En mi desesperanza, no sé, quien soy.
Miro hoy tu foto… de adicta a la tinta
y fenómeno de circo.

miércoles, 6 de noviembre de 2013

Me sorprendes


Me sorprendes, como atrapa el mar a los niños,
como atrapa la luz, una cera encendida,
a las enamoradas pupilas.

Como atesoran los obsequios, la risa de los críos.
Como apresa a la golondrina el frío, la ceguedad al príncipe.
Como el cambio climático enajena a la tundra y al glaciar
como apasiona al mar, el agua dulce del río,

Como captura la playa a las olas y la brisa a la mañana.
Como cautiva el roció al caracol, a un perro, una mariposa,
como a la madre, su hijo recién nacido;
como a la cascada, a su agua cristalina, lo intrépido del salmón,

como la arena del desierto, el viento que la tergiversa, 
como encierra al ratón las pupilas de un gato,
como atrapa a un insecto, la lengua larga de un batracio,
como rodea la negrura del cielo al rayo.

Como la pradera reúne, ata a las hojas del otoño.
Como acaparan y mezclan los colores del arcoíris,
 los pájaros, los peces y los capullos.
Como enlaza al cactus, la compañía efímera de su flor,
como atrae a las hadas los avellanos, los manzanos y los robles envejecidos.

Como refunfuñan sacando las uñas mininos de 20 días.
Me asombras, como lo hacen los retratos marinos tomados en lo oscuro,
a 5 mil metros, dentro del abismo del mar.

Como el derribo de un eucalipto al águila audaz
y a las aves lira. Como la lluvia al desierto, que la afierra.

Como defiende un pato a una gans

sábado, 2 de noviembre de 2013

Tan pronto el sol pensaba en ti.



Tan pronto el sol pensaba en ti.




Por tu boca, en ensueños


me engullía las mañanas.


A sorbos los mediodías,


delirando por tu rostro.




Pensar en ti, tan pronto el sol.




Al verte jugueteaba el corazón.


Tú en mí, en todos los ocasos,


por los te quiero de tus ojos.




Tan pronto el sol, pensar en ti.




Por tu amor aguardaba en la calleja.


¡Ahí sin ti... con luceros y luna!


¡Qué niño fue mi amor,


a tus ojos… siempre prendido!




Tan pronto salía el sol pensaba en ti.

A olor de amantes.



Te fui queriendo


como fui queriendo a tantas.


Como a tantos me olvidaste,


como a tantas te recuerdo.


Tu recuerdo es más reciente,


esta impregnado de tu cuerpo,


y del olor a amantes.


Del color café de tus ojos


salí húmedo y a salvo.

A través de la ventana


¿Te acuerdas de las hojas cayendo en el
otoño cubriendo al bosque de dorados ruidos,
nuestro caminar tomados de la mano?

 ¿Recuerdas querida nuestros días
juntos siendo tú, para mí el amor, sabiendo que de tu boca los te quiero
eran tan de verdad? 

Hoy en el invierno recuerdo tu presencia a través de la ventana.

viernes, 18 de octubre de 2013

Mira como he finalizado






Un poco desacostumbrado
a los inesperados saltos del corazón,
sorprendido, con alegría abrí tu correo.
conociéndote, p
ensé que jamás me contestarías.

“Yo tuve para mí muy claro que nunca me has querido.
Te he gustado, que es muy diferente,
y a eso le has puesto el nombre de amor”

me cuentas en tu mensaje.

Al niño que fui, le sorprendió tu belleza
aquella tarde de abril. (jamás lo he negado)
La hermosa tarde en que te conocí,
hace ya tantos años.


Para mi fue un descubrimiento. 
¿Me gustaste, tanto... que aún me gustas!
Por muchas cosas que tú sabes,
por muchas que ignoro;
por muchas que yo sé,
y por muchas que tú desconoces,
un noviazgo entre nosotros, nunca se dio. 

y sin embargo fuiste mi primer amor.
¡Que nunca te quise! Ni tú te lo crees.

Cuando se quiere aceptamos
a la persona como es y así te quise.
Tú nunca has sido una perita en dulce,
ocupada en miles de cosas,
siempre sin tiempo, egoísta, voluble.

 Y sí, no te conocí más,
fue por tu carácter, imprevisible,
cambiante y explosivo.
¡Que por cierto siempre me atrajo!

Mis criticas esporádicas
que mencionas son;
sobre tu búsqueda incesante
de una religión que te revele
los misterios y te permitan
no sé que explicación interior.
Una solución para ti apremiante.

Ya, en un poema de ayer, 

he descrito lo que en la secundaria, 
percibí en tus ojos. 
Mi prisa a la salida de la escuela,
tratando de alcanzar tu paso presuroso,
declarándote mi amor, el llanto de tus ojos
Tu ira, que obedecían a la vergüenza
y la culpa inculcada en ti. 

Te recuerdo el poema:


¡Te quiero, te quiero!
gritaba él chaval
en una mañana de sol
y ella una niña corría también

Regreso solo,
no comprendió su llanto,
su rabia, su miedo, su rechazo.

Sí antes en el galanteo,
en sus ojos que hacían
tan bello su rostro,
se asomaban; los te quiero.

Tiempo después entendió a una
religión y a una madre aún más severa.

Tú como yo, sufrimos,
la perdida de un hermano
a más temprana edad yo, que tú.
Tanto te quería que fui al velorio
de tu hermana, sólo por ti,
por intentar aminorar tu angustia,
y tu dolor, porque lo entendía, 

porque yo, ya había pasado por eso
y porque te quería. Deseaba consolarte

Inútil fue, porque esa noche
nunca saliste de tu cuarto.

Yo entendí con la muerte
de mi hermano y corrobore
después, que la supuesta existencia
de los dioses de las diferentes
religiones, son mas nada,
que la explicación, y la obediencia
ciega a la ignorancia y a los dogmas
Una explicación piadosa y una forma
de negar en esta vida; la muerte,
conjeturando un transito a una “vida eterna”

Las religiones no tiene mas fin
que aletargar. ¿Has madurado que todo mundo
se hiere y se mata en nombre de un Dios?
Sí alguna afinidad tuviera con la mitología,
seria con la de los griegos, con sus dioses y semidioses
llenos de virtudes y de defectos,
fielmente humanos, y hasta divertidos.

¡Mira como he finalizado,
sí, lo que quería decir,
es que siempre te quise!

El poeta dialoga con el pasado




El instante es fugaz y el segundero es testigo. La expansión del universo, el mismo ser es pasajero. Pasajero, es un momento como el chasquido de un beso. Desear que el presente se quede es un desatino Desatino es intentar atraparlo, querer retenerlo. El presente es sordo y hablar con
el
, es inútil Inútil, porque tan pronto inicia, ya se ha ido. Es el tiempo en que se escribe un poema, y al leerlo inicia el olvido, la historia. La historia es lo que hemos sido, el cúmulo de épocas que se marcharon El poeta escribe, así subraya su pasado, él, solo es ratos; de infancia, dicha, fracaso. Recuerdo de sueños, pubertad y melancolía. Melancolía es añoranza un buceo en las aguas de lo sucedido; un retorno a la calle de la niñez, al tapanco de los vestidos viejos. Viejos jirones, donde hurga el poeta. El poeta siempre voltea y mira al niño, y no siempre le pide perdón. El poeta dialoga con el pasado, y su obra demora a su olvido. Mientras está vivo.

jueves, 17 de octubre de 2013

Signos en tu rostro







Símbolo de besos tus labios,
con mensajes en tu risa.
En tus ojos cafés, 
ese verde que yo distinguí,
y el desnudo de tu labios, del rojo carmesí.
fueron las señales, de prohibido, prohibir.

No le hizo falta ningún perfume.
al afiche de tu cuerpo.

Tu pelo, ave, satín en el aire
Tus senos me hablaban del ascensor de un piso
Tus piernas dentro de la minifalda, de la genialidad de la genética.
y de Mary Quant.

Te cargue los libros, nos fuimos charlando y tuvimos una hija.

miércoles, 16 de octubre de 2013

La melancolía del abuelo.



Vi al abuelo, mirar al horizonte. ¿En que piensas? le dije.


En el silbato del afilador y la manivela del organillero
en las buenas personas que conocí: en los serenos,
en Paco, el vendedor de globos, en Manuel el ropavejero,
en Ruben el picapedrero, en los cocheros, los faroleros
en los repartidores en burro, en el huevero, el molinero,

 y en Miguel el sastre, o en Julian el cahatarrero.
 muertos ya, todos ellos. 
Recuerdo mis amores con las lavanderas.

Me habló del labrantío; de los aldeanos, de la buena gente lanzando las mies.
De la reja rompiendo la tierra, de los campos, de la yugada, 
de los bueyes; 
de la yunta y su yugo, su uñir en la labor, del sudor en su cuerpo.

Cuando la escasez, de los pastos, comiendo, el ganado ramón.
Me habló del herrén, de los manojos, de la media de trigo, de la hacina... de la panera,
De la poda de los arboles, con macha o podona afilada, de la parva y de la era.

Rememoro la mancera; el mandileto de las borregas. 

Pienso, me dijo, en tu abuela, mujer tan bella en el hilar,
en su rueca y en el uso. Cuando los fríos, con toquilla vestía tu abuela.
Pienso en aquellas noches cubriéndonos con tapabocas.
También en tu padre y sus primeros dientes,
untándole rescaño, para aliviar su escozor.

Fueron tiempos, idos, muy duros y bellos..

Me di cuenta que en el campo de sus ojos, los rastrojos,
habían echo llorar al abuelo.

Le di un abrazo, un beso y me fui.

Un poco de humor: Fornicius under concensus of king.




Mi lengua bilingüe entre los recodos de tu cuerpo

-¿Love me?
-I like you. I am fascinated by
¡Yeah, more, more!

-¿I like you?
-Yes, yes, yes. ¡Yeah!
¡Oh!, ¡oooh! ¡My God!

Mi lengua con ese sabor a miconazol
más el ardor de tus uñas en mi espalda.
Tú, en pleno orgasmo,
para caer de una pieza..

Y, yo aún el hombre erectus,
debajo de la regadera
entre el agua fría.
My melancholy, it is as cold water.

domingo, 6 de octubre de 2013

Esta noche al ajedrez juguemos

 

Esta noche al ajedrez juguemos
entre astucias, tú reina, señor yo.
No seré alférez de negro rencor,
sólo pararrayo, de tus lances albos.

Corceles de amor te enviare.
A ver si termino con tus enojos,
No perderé de vista tus ojos,
a tu desamor es preciso rendir;

bajarte de tu torre de marfil,
ponerte en jaque, tu odio, amor es sólo.
Resistirme no sabrás. ¿Para que alfil

que nos case? No es mi perfil abdicar,
pero desde que te vi, soy un tórtolo.
Rendido a tus labios, seré tu dueño.

jueves, 26 de septiembre de 2013

Mari Carmen





Abril y mayo tu nombre,
con sabor a travesura
a peligro,
a la firmeza de tus senos.

A tu grito de te quiero
apagado por la lluvia
sobre el coche,
torrencial y cómplice.

Abril y mayo.
ligado por siempre a tu nombre
y a la nostalgia futura.

miércoles, 25 de septiembre de 2013

Hay días







Hay días 


……grises

……...de viento

…………iracundos

……………… de tormenta




Días

..… Suspiros

..…… lloros

……… lluvias

………… susurro



Días

....Oasis

cristalinos

……. de brillos

……….  y esplendidez.

martes, 24 de septiembre de 2013

Un poco de humor Erosman Un ser gótico




Un ser misterioso que jamás había visto
ni en sueños imaginado, haciendo piruetas
al oscurecer por mi calle, 
de pronto, se poso junto a mi lado.

Un ser, bien parecido, galán,
de ojos grises y soñadora mirada.
Rozándome su voz, como un hielo sentí derretirme,
más allá de la intención, que yo, ya presagiaba.

Un poco más, pensé el resistirme,
observe sus hombros anchos, su varonil presencia.
Había algo en él de bahía, de sal y de mar,
de esencia, de medieval caballero.

Con ese antifaz adquiría su faz notoriedad,
belleza indescriptible. A su lado un perro negro, 

azul... de lo negro, de aspecto fiero,
y al parecer, del héroe  inseparable.

El frió, la luna en el cielo, los celajes amarillentos,
le otorgaban a la casi noche, un espectral aspecto.
Con sentimientos encontrados de mujer: placer gusto y miedo
supe decir ¡Sí! cuando me dijo: ¿quieres conmigo coger?

Dije: ¡Si, sí, pero que el perro se vaya!

Erosman II






¿Como describir a Erosman
de un mirar gris y frío?

Es un seductor, merodeador,
recio, sólido... un jayán,
sin músculos deformes. 

Su disfraz, es entremezcla,
medieval y actualidad.
Armonía y antifaz.

Recuerdo sus aventuras,
relato bien los sucesos:
Un callejón sin salida
y féminas riñendo, alaridos,
rasguños y del pelo muchos jalones.

El motivo un gañan
de esos chulos,
vividores de la féminas.
Ante la navaja del padrote
intervine Erosman
Con un ¡zas! ¡Pan! ¡Pun y ¡zote!

al mantenido derriba.

Su silueta a contra luz
a las damas alucina.
A cada una abraza,

y anima, dándoles después un beso.

¡Que varonil aroma!

dice una de ellas
“Fragancia Erosman”
de patente registrada
y... muy pronto a la venta
le responde esta leyenda.

La luna detrás de la atalaya,
es ya la madrugada
la aguja marca las cinco
Rompe, desgarra el silencio
el sonido del volar de los murciélagos
que  a su morada 
regresan.

Una se mira amorosa,
la otra más lasciva
Andan cada una,
de los brazos, de su ídolo
Una palpa ahí... ¡Uy que grande!


El perro azul de lo negro,
el perro, se rezaga... lo entiende
Una de las damas lo nota,
con la otra, cruza una cómplice mirada.
La matrona grita…
¡Ven, ven, ¡"scooby doo"!

”Diácono” ladra,
del contento mueve la cola,
tras de ellos corre lúbrico.
La más liviana, a Erosman
un ojo le guiña.

Un poco de humor





Descubrí el secreto
la Monalisa
esta pacheca*


* Pacheca estar bajo el influjo de la Marihuana.

Entre olas de ocaso y olvido






Ahí estaba yo, como el horizonte,
entre el mar y el cielo,
Como arena, entre olas de ocaso y olvido,
entre el vuelo de los pájaros en regreso.

.
Ahí estaba yo en aquella penumbra
de constelaciones brillando,
ahí en la noche, con el cielo claro,
cuando leí tu adiós .

-
Me quede ahí entre el sonido,
de élitros de grillo,
de timbales de cigarras.
Entre añoranzas.

Entre la lluvia,
que después desataron las centellas.
Ahí permanecí...
lavando mi alma, en la llovizna.

Por eso, no te extrañe.

lunes, 23 de septiembre de 2013

Por nuestras venas el mar discurre



Flotar de noche,
en la insonoridad,
flotar abandonados,
desnudos.
En el derroche del silencio,
flotar en total oscuridad.

Flotar mirando
tan... adentro.
Meditando,
flotar ingrávidos.
Flotar enfrentándote
a los miedos.

Flotar;
y sólo tu respiración,
flotar,
oyendo el latido de tu corazón,
flotar y olvidar,
dejar atrás razón y tiempo

Flotar, evocando
en la humedad
a la sonrisa,
al cordón umbilical.
flotar ciegos,
en la infinidad.
-
Flotar olvidando al mundo,
desterrando rostros.
Flotar y abandonar al yo.
En lo absoluto, boyar tranquilos.
Del espacio sideral omniscios,
flotando hasta el delirio.

Hoy me fui a la mar, a su olor a sal.









Hoy me fui a la mar,
a su olor a sal.
Al ruido de gaviotas
que envuelve a la costa.
A convivir con las blancas
gaviotas; de puntiagudas alas,
con señales negras,
tan bellas e inteligentes.


Hoy me fui a la mar
a su olor a sal.
Y a su arena,
piedras disgregadas.
Arena blanca...
arrecifes de coral.
Hoy me fui a la mar,
arropar al viento
y a la espuma.

Hoy me fui a la mar
a su olor a sal,
a percibir en su cielo,
dentro de la nubosidad,
sus círculos de azur.
Sus calmas nubes,
de nieve cristales,
dispersando la luz.
A mirar, a lo lejos,
a vivir los azul salobres
que con la altura, se confunden y enredan.

Hoy me fui a la mar
a su olor a sal.
A mirar las estrellas
las del cielo y las de la mar.
Unas: puntos fríos, titilantes,
viento estelar y neutrinos.
Destinos de Hiparco,
estrellas en grupos
que brillan distinto.

Las otras, simetría
pentaradial.
Leyenda…
de la noche y del cielo.
Se dice que Zeus
celoso, maltrato
a la estrella,
derrumbando uno de sus brazos,
cayendo el meteorito
en la mar.

Escindida, en el océano
con sal y autoestima,
ella se completó.
Con el amor de Posidón
el mar se lleno de sus hijas,
y si, el amor las lastima,
ellas se renuevan.

Hoy me fui a la mar
a su olor de sal,
a su humedad, a su brisa,
a escuchar sus caracolas,
Volviendo a ser niño,
al juego y al viento.

A mi regreso poesía, no me preguntes…
no preguntes, si te extrañe.

Un poema que se pierde



Traducción del español al italiano de Sebastiano (Al Qantar)

Una poesia che si perde
è un sentimento di vuoto,
un’immensa tristezza.
E’ una donna che un giorno,
innamorati, abbiamo avuto dentro di noi,
che baciammo e amammo
e che se ne andò,
e oggi… non ricordiamo quegli
occhi, quelle labbra,
nemmeno quel corpo così bello
A volte, si… un po’… solo nei sogni
Una poersia persa;
è una dichiarazione d’amore,
che mai si pronunciò,
un’immensa malinconia,
senza ritorno.Una poesia che si smarrisce
non si ripete più,
dimentichiamone le parole,
il suo esatto sentire, la sua tachicardia.
Si perde nella memoria,
come le parole d’amore antiche
Provare a rifarlo,
è tentare l‘oblio
in altre labbra e piaceri
in altre carte e matite.
Che vogliamo ancora… non torneranno i suoi baci.



Un poema que se pierde
es un sentimiento de vacío,
una inmensa tristeza.
parte de ti que no encuentras.

Es una mujer que un día
enamorados, tuvimos tan dentro de nosotros,
que besamos y amamos

Que se fue,
y hoy… no recordamos aquellos
ojos, aquellos labios,
ni aquel cuerpo tan bello
A veces, si…un  poco…. y sólo en sueños

viernes, 20 de septiembre de 2013

Las caricias de tu cabellera




En noches como estas
de viento frío,
de ruido de océano,
no brillan en el cielo 
plomizo las estrellas.

Camino por las veredas,
camino, por mi caminos.
y es mi destino la arena.

y renace en estas noches
el azabache de tu pelo,
lo lucero de tus ojos.

Las rachas de viento me traen
las caricias de tu cabellera.
En noches como estas, tus besos serian mi salvación,
porque en mi memoria aún ronda;

aquella brisa enredando tu pelo,
mientras la llovizna, mojaba a la playa.
El vaivén de la espuma, jugando entre las rocas
y el rastro del mar, tras de tus huellas.

Fueron tus ojos peces, en agua de lluvia.
¡Potro tu cuerpo, entre olas y arena,
cuando el sol moría, entre tus piernas!

miércoles, 14 de agosto de 2013

Abre sus ojos te mira




Una página
es como una mujer
que te mira,
y espera;
transparente,
sumisa,
suave, ausente
que desnuda,
te espera,


y junta
sus grandes
pestañas. 


Da tanto desasosiego,
el equivocarte
en los vocablos,
o en las pausas.

Rehacer lo hecho,
un nuevo inicio,
casi siempre
rompe el hechizo.

Mudo, esperas
que tu mensaje
nazca
dulce,
tentador,
seductivo,
claro y bello.

Al surgir la euforia
es entonces
que la llenas
de palabras,
y le susurras
tiernas voces de amor.

Y en el embeleso
la ensalivas, la abrazas,
con ella te fundes.

Te preguntas
cuanto es que la quieres.

Ella sigue ahí,
pero ahora vestida,
de voces, plena de frases,
echa poesía.


Es entonces que abre sus ojos,
y con otro brillo de nuevo te mira

martes, 13 de agosto de 2013

De ocaso y madrugada



[
Vivo entre
los verdes
de la pradera, de los jardines, 
de la hojas, y de la floresta.
Entre el limón de tus ojos permisivos.

Entre mis amarillos,
de naranjos
y Jazmines.
Entre los amarillos de arbustos,
girasoles y crisantemos...
entre el oro otoño de tus ojos.

Entre mis negros;
de gato, de potro,
de oscuridad, sin luceros, de mata de pelo, 
de pozo, y túnel,
y de boca de lobo,
entre la magia de tus ojazos brujos.

Entre mis azules
de petunias, de felicias
y lobelias,
de lago
y heliotropo.

De los matices del añil que yo recuerdo,
entre indigos de mar y cielo...
entre los Jacaranda de tus lindos ojos.

Vivo entre colores,
de los ojos;
verdes de Aubriel,
los ocres de Ursula,
los negros de Paula
los azules de Jimena…
en los ratos felices de ocaso y madrugada.
____

miércoles, 22 de mayo de 2013

En este cuarto




En este cuarto tan tuyo y tan mío,
hemos compartido paz  y orgasmos.
Este cuarto ha sido nuestro niño
dando sus recuerdos los primeros pasos.

Lo alimentamos con ternura y
lo hemos visto crecer, con cariño
le dimos sentido y libertad.

Siempre le preguntamos y nos
interesa su futuro de amor compartido.
Es tan indefenso... tan confiado, que se le
agregan cosas y las creé.

No ha aprendido a engañar.
Tiene tanto interés por saber,
que no le debe faltar tu amor,
sin él crecería torvo, reprimido... amargado,
la tristeza lo envolvería...

y dirían; ¡Que cuarto tan triste¡

domingo, 10 de marzo de 2013

Días grisdulces, agritristes.



Te vi pasar y fue una rapsodia
de insomnio, de días de poesía.
Mataba el tiempo asomado a tus ojos

No volverá a ser más mi alma de tus labios.
No tornaran aquellas tardes de lujuria,
que se llenaban de luna... y de besos.

Hoy soy una hoja separada de ti,
inicio que no te retiene.
Un a
mar como te amo.

Las gotas de lluvia me acompañan hoy
son como notas de piano,
tristes, muy tristes,
que hablan de ti y me mojan.



viernes, 15 de febrero de 2013

Un vuelco del reloj.



Un vuelco del reloj, y el desliz
de las diminutas, lentas arenas.
Alba neblí humo de un ser infeliz
El hervor en un día más de hienas,

polvoroso, de color gis
En las azoteas las antenas
que me deprimen; cáliz
cotidiano, de mis penas.

Alrededor escarapeladas paredes,
sobre posición de tiempos.
La marquesina fanal de luz;
claridad y sombras. En redes

de las llamas emerjo en pos
como este huevo en cocción, al uso

jueves, 14 de febrero de 2013

Décimas Todo inició con tu aroma






Todo inició con tu aroma
así que torné la vista,
miré tu ser de corista
que llego hasta mi genoma.
Olvidado del idioma
esta mujer determina
que fenil etil amina
se libere en mi cerebro.
El capricho de un requiebro
colmado de dopamina

El flechazo del amor:
es un cierre sin retrasos,
de arterias, como de vasos
De la glándula el clamor
que reduce al desamor.
Un vuelco en los corazones,
la hipertensión sin razones,
la glucosa por tu sangre.
Te piensas un pura sangre
y a los consejos te opones.

De ella conquisté su abrazo
El contacto de su dermis
fusionada a mi epidermis,
sin que se termine el plazo
de besos, que son un lazo.
Culpable la oxitocina
sí otro coito se cocina.
También la testosterona
en éxtasis se corona,
a otra copula encamina.

Caos es enamorarse
mirándola en una nube.
Cuando la presión te sube
todo es suspiro y mirarse...
amor eterno jurarse.
Directrices obsesivas
te obligan enviarle cursivas,
y la razón es intrusa
a medianoche sin trusa,
mientras tú te la ensalivas.

Cogida así en la botella
la lealtad es un genio,
pero no, ningún convenio
te une a una mujer bella,
ni evitara la querella.
Un alelo* es mi faltante,
que del apego es causante.
La culpable es la bioquímica
como la herencia y la química
si no duro con la amante.

Si por fin todo termina
será adicta al chocolate
porque su corazón late
sin la pasión que domina,
y con llantos recrimina
no ver más el mundo rosa,
sin amor, ansia la fosa
Entrar en amor es fiebre,
y desvarió. También liebre,
que se escapa de la diosa.


*El alelo (334)