lunes, 16 de agosto de 2010

Te acercaste a mi




Fue un beso tan tierno y tan sensual.


Tus labios en mis mejillas,


con su humedad de saliva.


Fue tal la picardía,


que aún el escalofrió recorre mi cuerpo.



Lo cercano de tu rostro,



mitigo mi sed, de ti.


Como nunca me acerco a tu ser,


ese beso que sentí en la piel.



Después de tanto tiempo de olvidarte


has aparecido en mi sueño y como nunca


me has besado.

3 comentarios:

Jose Zúñiga dijo...

Bello quiebro final.

ISABEL MIRALLES dijo...

Hasta el beso más casto puede producirnos un escalofrío que recorra todo nuestro ser; así es cuando existen sentimientos.

Bello poema, Gabriel.

Joan Tristany dijo...

Hola Paso a saludarle por aquí amigo mío.
Este poema está en equilibrio entre la fregilidad y la pasión que conlleva un besos.
me ha gustado.

un fuerte brazo

Joan