lunes, 12 de abril de 2010

Dos niños




Tu cara de niña,

tus ojos de niña.

Mis ojos de niño, gritando

a los tuyos: te quiero

¡Tu boca de niña y tu tez

Mi boca de niño aquel pez


Se trasformo el paisaje

y crecieron tus ojos,

crecieron los míos.

Crecieron nuestros cuerpos,

maduraron nuestras bocas

conocimos a otras gentes,

y nuestros besos, se dieron,

por desencuentros, en labios ajenos.


Mi alma de niño

a pesar de tantos años.

mi alma de niño, no creció

y te sigue queriendo.

Mis ojos no te recuerdan,
pero lo hacen mis sueños.

2 comentarios:

Patty dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Ío dijo...

Hermoso, Gabriel.
Aunque los ojos del cuerpo no recuerden, sigues teniendo el alma para verla.
Besos

Ío