
Hoy, como algunas otras noches
supe de ti, regresaste a mis sueños.
Esta vez no paseamos por el parque.
Ni me esperabas, observando a través de la ventana.
Tampoco llovió.
Ni te convertiste en ola o viento.
Juntos charlábamos.
Hablamos como nunca,
por horas, nos escuchámos,
no cupo la nostalgia… hasta despertarme.