jueves, 27 de febrero de 2014

Eres un delfin




Eres un delfín
y, yo en la mar
sigo tus juegos.

Sin fin...
es amar
tus jugueteos,

tu coqueteo
y tu rabiar.
En fin

tu flirteos,
y este, tu no notarme,
será mi fin.



domingo, 23 de febrero de 2014

Mujer de juegos








Eres

muy afín

a los fuegos…


A los juegos,

que no tiene fin.

Eres de los seres


que no tienen confín,

en los deseos infieles,

y a ello, tu ruego.


.

A estos menesteres,

al regodeo de tu ego.

al fin, por fin, les di fin

sábado, 22 de febrero de 2014

¡Una caridad para este pobre ciego!.




En mi lenguaje hay palabras
dichas a ti, perdidas,
que nunca he vuelto a repetir.

Tanto te quise
que huí de tus brazos.

Porque me aíslo,
me amargo
y me engaño,
no queriendo ver mi futuro.

¡Una caridad
para este pobre
ciego!.

viernes, 21 de febrero de 2014

Tu cuerpo de aceituna cobijar, en esta de ti, mi hambruna.



Sin  defensa entre tus besos 
y ternura. Entre susurros,
voy a la deriva por tus dunas,
al éxtasis y a la fortuna.



Ya se aúna a mi sosiego
tu dormir. Narre la runa,
reúna la rima.... lo sentido,
en esta luz de Luna


domingo, 16 de febrero de 2014

Te pensé ese árbol




Pensé que eras
ese árbol que mueve el viento,
alborotando sus hojas.

Ese árbol lleno de nidos,
chillantes, alegres,
poblando mis sueños. 


Te pensé parte de mi naturaleza
en ese azul triste, cuando la tarde muere. 


El árbol es fiel,
solo es para el viento,
el único que lo hace vibrar,
sentirse tan alto.

Lloré, 

había tanta agua para su sustento, 
pero faltabas tú y yo era el viento.

A toda vela en tu tez









Rompeolas tu cuerpo

y los peces de tus ojos

entre tu marina risa.


La sal de tu mirada

en la prisa del aire.

Tu voz infiltrada

de desaire 




y el coral de tus uñas

en la reminiscencia,

de la buena calaña

de mi espalda...

 aún 
rasgando el alma.

martes, 4 de febrero de 2014

Yo sé que tú eres noche.



Yo sé que tú eres noche encendiendo
farolas en mis sueños.

Tu perfume impregna, a la piel de mi cuerpo

a las  sabanas, a la almohada, a las paredes del cuarto
y trasciende la ventana.

En el campo tu aroma y en mi cuerpo tus besos.